EL MERCADO ASEGURADOR - Reglas de ordenación y contratación
La actividad aseguradora, en
palabras de su normativa reguladora, supone el intercambio de una prestación
presente y cierta, la prima, por una prestación futura e incierta, la
indemnización. La relevancia, cualitativa y cuantitativa, de la actividad aseguradora
en el mercado justifica la existencia de reglas de ordenación y contratación
que son las que, de forma detallada y sistemática, se abordan en esta obra. Con
ese objetivo, se parte del análisis de las normas de ordenación y supervisión
del mercado asegurador que persiguen garantizar que cuando eventualmente se
produzca el siniestro que motive el pago de la indemnización la entidad
aseguradora esté en situación de poder hacer frente a su obligación, lo que
justifica que la ordenación y supervisión de las entidades aseguradoras por los
poderes públicos resulte una materia de interés público. En segundo lugar, se
examina el sistema actuarial. La ciencia actuarial estudia los riesgos de las
aseguradoras a través de modelos matemáticos y estadísticos complejos y, aunque
ha ido evolucionando, lo cierto es que la regulación de cada uno de los estados
y la normativa europea e internacional no han dejado al albur del sector
privado la imposición de ciertos requisitos para asegurar la solvencia estática
y dinámica del sector asegurador. En tercer lugar, se analiza el contrato de
seguro, con especial atención a los pronunciamientos judiciales más relevantes
en la materia. Tal y como lo han definido nuestros tribunales, el contrato de
seguro se configura como instrumento jurídico de protección del asegurado
frente a determinados riesgos que operan como motivo determinante para su
celebración por parte del tomador, que pretende de esta forma preservarse de
ellos ante el temor de que llegaran a producirse, generándole un perjuicio. En
cuarto lugar, se aborda específicamente la liquidación del siniestro en los
seguros contra daños. La ocurrencia de un siniestro es el momento fundamental
en la vida del contrato de seguro. Es a partir del siniestro cuando las partes
se enfrentan a la necesidad de concretar el importe de la indemnización y
determinar el momento en que dicho importe se puede considerar líquido y
exigible, lo cual no siempre es sencillo ni está exento de conflictos como
consecuencia de la contraposición de intereses existente entre asegurador y
asegurado. Por último, se expone la tipología del contrato de seguro, materia
compleja de delimitar. La dispersión normativa dificulta una clasificación
única y uniforme de los contratos de seguro previstos y existentes en nuestro
mercado asegurador, por lo que se ha optado por seleccionar los seguros más
frecuentes en el tráfico económico. En definitiva, una obra que analiza las
reglas de ordenación y contratación en el mercado asegurador desde un enfoque
general e interdisciplinar, con sólidos aportes legislativos, judiciales y
documentales, a la espera de que sea un instrumento útil para los profesionales
del sector y también para quienes profundicen en el conocimiento de esta
normativa.